Muelas con caries profunda: tratamientos para salvar tus dientes

Muelas con caries profunda: tratamientos para salvar tus dientes

Una muela con caries profunda no solo causa molestias, sino que puede comprometer la salud general de tu boca y tu calidad de vida si no se trata a tiempo. Afortunadamente, existen tratamientos modernos que permiten conservar el diente natural y evitar la extracción.

¿Qué es una caries?


La caries es una lesión en los dientes causada por una infección; es decir, es un daño provocado por bacterias que destruyen el esmalte dental y, si no se trata a tiempo, avanzan hacia el interior del diente.

Este problema es mucho más común de lo que se piensa, y en sus primeras etapas puede desarrollarse sin causar síntomas evidentes. Por eso es tan importante conocer sus signos y síntomas.

La caries no siempre provoca dolor, lo que hace que muchas personas no se den cuenta de que está presente. Lo más común es que no cause molestias hasta que ya ha llegado a capas más profundas del diente, como la dentina o incluso el nervio. Por esta razón, es fundamental asistir a controles dentales una o dos veces al año, incluso si no se siente dolor o incomodidad.

¿Qué es una caries profunda?

La caries profunda se produce cuando la infección y descomposición dental han progresado más allá del esmalte y la dentina, llegando hasta la pulpa del diente, donde se encuentran los nervios y los vasos sanguíneos.

Este tipo de caries suele comenzar entre dos dientes o muelas, desarrollándose como caries interproximales (en las zonas donde solo puede acceder la seda dental). Afecta con mayor frecuencia a las muelas, ya que su anatomía es más compleja y están ubicadas en la parte posterior de la boca, lo que dificulta una limpieza adecuada. Como resultado, estas zonas son más propensas a la acumulación de placa bacteriana y, por ende, a desarrollar caries profundas.

Signos y síntomas de una muela con caries profunda

Detectar la sintomatología de una caries profunda a tiempo es clave para un tratamiento exitoso. Los más comunes incluyen:

  1. Manchas en los dientes: pueden aparecer manchas blancas (zonas de desmineralización) o manchas más oscuras, como cafés o negras, que no se eliminan con el cepillado.
  2. Sensibilidad dental: molestias o dolor al consumir alimentos o bebidas frías, calientes o muy dulces, debido a la exposición de las capas internas del diente. 
  3. Dolor intenso: especialmente al masticar. Este dolor puede volverse pulsátil, constante e incluso espontáneo (aparece sin un estímulo claro), y tiende a empeorar durante la noche. Si el dolor no mejora con analgésicos, generalmente indica que el nervio dental ya está infectado y comprometido. Por eso, lo ideal es acudir al dentista apenas se presenten molestias o un dolor leve.
  4. Inflamación o enrojecimiento de las encías cercanas: ocurre cuando el diente está tan debilitado que sufre una fractura, lo que facilita la acumulación de restos de comida, inflama la encía y dificulta la higiene.
  5. Cavidades visibles: aparición de hoyos en las muelas o sensación de rugosidad en la superficie del diente. Puedes notarlo con la lengua como una zona diferente que incluso puede causar pequeñas heridas.
  6. Mal aliento o sabor desagradable en la boca: consecuencia de la descomposición bacteriana en el interior del diente.
  7. Formación de abscesos o hinchazón facial: en casos avanzados, cuando la infección traspasa el diente y se extiende al hueso o tejidos blandos circundantes.

Si presentas uno o más de estos signos y síntomas, es fundamental acudir al dentista lo antes posible.

Tratamientos para una muela con caries profunda

El objetivo principal del tratamiento es eliminar la infección y conservar el diente. Los procedimientos más comunes incluyen:

1. Tratamiento de conducto (endodoncia)

La endodoncia es la opción más efectiva cuando la caries ha alcanzado la pulpa. Consiste en eliminar el tejido dentario dañado, sacar el nervio del diente contaminado, limpiar minuciosamente los conductos radiculares, eliminar completamente el tejido infectado y sellar el diente para proteger y evitar nuevas infecciones.

2. Reconstrucción con resinas o incrustaciones

Una vez realizada la endodoncia, la muela debe restaurarse ya sea con resina compuesta, una incrustación o una corona para recuperar su forma y funcionalidad. La elección del tratamiento de reconstrucción va a depender de la cantidad de tejido sano remanente que queda y su resistencia, esta parte del tratamiento lo determina y lo realiza la doctora especialista en rehabilitación. 

3. Colocación de corona dental

En casos donde la estructura dental está muy comprometida, se coloca una corona para proteger y reforzar el diente tratado. Esta corona o “prótesis fija” reemplaza gran parte del diente conservando sus raíces. 

4. Extracción (último recurso)

Solo se considera cuando el daño es irreparable, el tratamiento de endodoncia no es viable o el diente tiene un gran movilidad y ya no hay posibilidad de salvar el diente, sólo en estos casos se opta por sustituir el diente por un implante. 

En Clínica Dent salvamos tus dientes

En Clínica Dent, nuestra prioridad es salvar tus dientes naturales, incluso en casos de muelas con caries profunda. Contamos con tecnología avanzada y especialistas en endodoncia y rehabilitación, que trabajan para evitar extracciones y mantener la funcionalidad de tu boca.

No ignores los síntomas. Agenda tu consulta y descubre cómo podemos ayudarte a conservar tu sonrisa.